Uno de los temores de las personas que toman la maravillosa decisión de dejar de fumar es encontrarse con unos kilos de más en este proceso. Se gana peso debido a que la nicotina afecta la tiroides, así como al sistema nervioso, el sentido del gusto y del olfato y la capacidad de asimilar los nutrientes de los alimentos, lo que conlleva un aumento en la necesidad de comer sin sentirse realmente satisfechos.
La forma de contrarrestar este efecto puede ser muy simple, pues se trata de cuidar nuestra alimentación, tomar muchos líquidos y, sobre todo, realizar actividad física para reducir tallas y combatir la ansiedad por dejar de fumar.
¿Por qué dejar de fumar engorda?
La respuesta a la pregunta: ¿dejar de fumar engorda ?, es sí. Sin embargo, no es tan simple como pudiera parecer. Existen diferentes factores que influyen al momento de dejar de fumar que pueden provocar un aumento de peso en algunas personas mientras en otras no ocasiona ningún cambio en su talla.
Cuando se presenta un aumento, también puede variar llegando desde subir menos de un kilo hasta de 5 kilos o más. Esto dependerá de muchos aspectos como el metabolismo, hábitos alimenticios y la actividad física.
Además, es muy importante mencionar que esté aumento de peso al dejar de fumar se presenta durante los primeros tres meses y después desaparecerá. Las causas son muchas entre las que se destacan la alteración del metabolismo, la ansiedad y síndrome de abstinencia.
Alteraciones metabólicas
El efecto de la nicotina y demás sustancias del cigarro que entran a nuestro organismo, altera el metabolismo, el sentido del gusto y el olfato.
- Alteración del metabolismo. La nicotina es un estimulante del sistema digestivo, lo cual en esencia estimula la digestión de los alimentos y la quema de grasa. Al abandonar el tabaco, el metabolismo se desacelera lo que puede inducir a una acumulación de grasa.
- Aumenta el apetito. Otro de los efectos de la nicotina es que reduce el hambre, por lo cual al dejarlo aumenta el apetito y se reduce la saciedad luego de comer. Por lo tanto, se busca comer en mayores cantidades y más seguido.
- Mejor gusto y olfato. Luego de un tiempo de fumar, se altera el funcionamiento del olfato y del gusto por lo cual los sabores pueden percibirse de forma diferente. Al dejar de fumar estos sentidos recuperan su capacidad y la comida puede tener un sabor más agradable, como consecuencia se come más y se aumenta de peso.
Ansiedad y nerviosismo
Una de las consecuencias de dejar de fumar que puede provocar el aumento de peso es la alteración mental ocasionada en su mayoría por el síndrome de abstinencia.
- Alteración del sistema nervioso. La nicotina altera al sistema nervioso y en especial a nuestro cerebro. Esta sobreestimulación en sí misma puede generar mayor quema de calorías, pero también se produce por un aumento de la ansiedad y la necesidad de estar activo. Cuando se abandona el cigarro y la nicotina podemos sufrir una concentración de calorías y una falta de energía, lo que a su vez lleva al aumento de peso.
- Síndrome de abstinencia. Tal vez la razón principal del aumento de peso al dejar de fumar sea el síndrome de abstinencia y la ansiedad que provoca. Las personas que dejan este hábito buscan sustituirlo con otro y la comida es una opción ideal, pues como se dijo en los puntos anteriores, el apetito aumenta y la comida tiene un mejor sabor.
¿Es posible dejar de fumar sin engordar?
¡Claro que se puede! Para evitar aumentar de peso al dejar de fumar, se debe implementar una alimentación fresca, balanceada para abandonar de una vez por todas el hábito de fumar.
Realizar actividades físicas
Practicar cualquier deporte o simplemente caminar nos ayudará a quemar calorías para evitar subir de peso y, además, combatirá el estrés y ansiedad ocasionados por el síndrome de abstinencia.
- Ponerse en marcha. Incluir la actividad física en la rutina diaria no solo quema calorías, sino que también ayuda a aliviar los síntomas de abstinencia y los antojos. Además, de ser un magnífico canalizador del estrés y de todas aquellas emociones que han estado conectadas a viejos hábitos.
- Dormir bien. Como bien es sabido, descansar de forma adecuada mejora tu metabolismo y la digestión, además te permitirá tener la energía necesaria para realizar actividades físicas benéficas para tu salud.
Mejorar nuestra alimentación
Para dejar de fumar sin aumentar de peso, es muy importante cuidar nuestra alimentación, respetar los horarios de comida, así como ingerir muchos líquidos.
- Elecciones inteligentes. Será necesario empezar a planificar las comidas saludables que incluyan muchas frutas y verduras. Comer porciones más pequeñas. Eliminar el azúcar y las harinas refinadas. Refrigerios saludables serán fabulosos como una salida cuando consideres que necesitas algo para comer.
- Beber mucha agua. Beber agua te ayuda a eliminar los tóxicos del tabaco por la orina, como la nicotina que es soluble en agua.
- Ingerir muchos antioxidantes. Las necesidades diarias de vitamina C son mayores en fumadores, ya que esta vitamina les aporta una especial protección antioxidante.
- Aumentar la ingesta de vitamina B. Las vitaminas del grupo B ayudan a combatir la ansiedad. Se encuentran mayoritariamente en cereales integrales y legumbres.
- Apostar por los sabores suaves. Comer alimentos que no tengan sabores muy fuertes y elegir los productos frescos. Así disminuye la tentación de fumar durante las comidas.
Alimentos que ayudan a combatir la ansiedad
Los alimentos que se recomiendan para reducir nuestra ingesta calórica diaria son muy variados y nos permiten hacer un menú a nuestro gusto como, por ejemplo:
- Cereales integrales y legumbres. Al ser de digestión lenta aumentan el efecto saciante.
- Fruta con piel. Tomar una manzana, pera con piel nos aportará fibra que nos saciará. Por otro lado, evitaremos los zumos, ya que, un vaso de naranja o melocotón, aunque sean naturales aportan más calorías que una fruta, pues se convierte en fructosa que irá directo al hígado aumentando los niveles de insulina y glucosa en la sangre.
- Yogurt sin dulce con frutos secos. Te ayudarán con la digestión y aumentarás la ingesta de vitaminas.
- Alimentos ricos en vitamina C. Eliminar la nicotina de nuestro cuerpo supone un gasto importante de esta vitamina. Se recomienda aumentar la ingesta de estos alimentos para ayudar a nuestro cuerpo. Aparte de los cítricos, podemos encontrar vitamina C en los tomates, pimientos, fresas, frutos rojos, melones, sandías y brócoli.
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